Richard Avedon

Nueva York, 15 de mayo de 1923 - San Antonio, Texas, 1 de octubre de 2004



Reputado fotógrafo de modas y gran retratista, comenzó su carrera profesional en los años 1950 realizando espléndidos trabajos de moda para la revista Harper's Bazaar, donde acabó convirtiéndose en Jefe de Fotografía. Posteriormente, habría de colaborar igualmente con otras revistas como Vogue, Life y Look. Sin duda alguna, fue el gran fotógrafo de la moda durante los años 1960 y 70. En sus trabajos consiguió elevar la fotografía de moda al rango de lo artístico, al conseguir acabar con el mito de que los modelos debían proyectar indiferencia o sumisión. Por el contrario, en sus fotografías los modelos eran personajes libres y creativos en sus gestos dentro de escenarios dinámicos y bajo esquemas compositivos previamente decididos.

Anais y la realización.

Autorretrato Miramar 2009


La realización consiste en completar un círculo. Hay que vivir cada uno de los aspectos del yo, las doce figuras del zodíaco. Es la personalidad la que ha desenrollado la cinta, la que ha abierto los pétalos y expuesto todas las capas. No importa dónde se empiece: sea con el instinto o con la sabiduría, con la naturaleza o con el espíritu. La realización significa que se han experimentado todas las partes del yo, que se han vivido todos los elementos, todos los planos. Significa que cada una de las células del cuerpo se despierta, vive. Es un proceso de la naturaleza, y no un proceso del ideal. Se muere cuando todas las células han llegado a su agotamiento: se llega a la plenitud cuando todas ellas funcionan: el sueño, el deseo, el instinto, el apetito. Uno despierta al otro. Es como un contagio. El orden no importa. Son igualmente necesarios todos los errores, los tartamudeos, los patinazos, las cegueras. Se trata de cubrir todo el terreno, todas las rutas. Que no quede un solo espacio sin recorrer, que no se salte ninguno. Si se salta una fase, se retrasará ese despliegue que se asemeja a las ramas cuando se abren. Crecimiento, expansión, plenitud del yo en potencia. Vivir solamente un aspecto, o un lado de la personalidad es como utilizar sólo un sentido: los otros se atrofian. Sólo hay grandeza en la realización completa, en la plenitud del despertar. Llegar a lo completo es hacer una sinfonía. Sublimar significa condenar a la inmovilidad ciertas partes del cuerpo con el objeto de llegar a un desarrollo monstruoso de otras. Como la sensibilidad normal del ciego, como el oído extraordinariamente agudo del mundo. Es monstruoso. Psicológicamente, una gran personalidad es como un círculo que está en contacto con algo en cada uno de sus puntos. Un círculo con un núcleo. Un proceso de la naturaleza, un crecimiento. No el ideal. El ideal es un error. La vida es un círculo completo que se ensancha hasta alcanzar los movimientos circulares del infinito.


Anaïs Nin
Diario II (1934-1939)

SOLAMENTE


Ya comprendo la verdad
estalla en mis deseos

y mis desdichas
en mis desencuentros
en mis desequilibrios
en mis delirios

ya comprendo la verdad
ahora a buscar la vida.


Alejandra Pizarnik

Patti Smith & Robert Mapplethorpe

Ph:Judy Linn, Norman Seeff

“Fue el verano en que murió Coltrane. El verano de Crystal Ship. Los hippies alzaron sus brazos vacíos y China hizo detonar la bomba de hidrógeno. Jimi Hendrix prendió fuego a su guitarra en Monterrey. AM radio retransmitió Ode to Billie Joe. Hubo disturbios en Newark, Milwaukee y Detroit. Fue el verano de la película Elvira Madigan, el verano del amor. Y en aquel clima cambiante e inhóspito, un encuentro casual cambió el curso de mi vida.
Fue el verano en que conocí a Robert Mapplethorpe”. Eramos unos niños, Patti Smith.
En momentos como este querría estar en el Asteroide B612
"Cada hombre es muchos hombres, a lo largo de los años, hombres tan distintos entre sí que, si alguna magia los pusiera cara a cara, se verían como extraños, y apenas sabrían hablarse. Por eso existe la memoria, esa compleja urdimbre de astucias y trampas, cuyo principal componente no es el recuerdo sino el olvido, encargado de ir borrando sin descanso a todos los que fuimos para que el que somos no se enrede y tropiece en la maraña de sus discrepancias. La memoria es la garantía de la identidad no porque preserva al que fuimos en el que somos, sino porque lo anega y lo honra. Así, los hombres de ayer se están desenvolviendo constantemente en el de hoy, así como el de hoy se disolverá eventualmente en el de mañana. ¿Pero que sucede cuando nos enfrentamos inesperadamente no a un recuerdo trabajado por el olvido, sino a un registro bruto, un rastro del pasado, sea un diario, una carta, una foto olvidada, o en la súbita, aniquiladora irrupción de la memoria involuntaria, que de un plumazo borra el ilusorio presente y reinstala en su lugar al imborrable pasado? Entonces el hombre que fuimos avanza a grandes trancos, mientras lo miramos paralizados, aferrados con pánico de usurpador a los brazos del trono de la identidad para que no nos saque de un empellón y siente en él sus reales."
(Un yuppie en la columna del Che Guevara,Carlos Gomero )
Extraido de un  lindo blog: http://entornalapuerta.blogspot.com/